Generic selectors
Exact matches only
Search in title
Search in content
Post Type Selectors

Agradecer antes de perder. Un trasplantado.

“Damos por hecho demasiadas cosas. No hace falta un susto para apreciar lo que ya es un milagro. No hace falta perder a alguien para decirle lo importante que es. No hace falta tocar fondo para entender que cada día es un regalo.”

Comparte este artículo

Nos pasamos la vida corriendo. Siempre hay algo que falta, algo que queremos, algo que nos inquieta. Y en medio de todo eso, apenas nos damos cuenta de lo que YA tenemos. Hasta que lo perdemos.

La salud, el tiempo, una persona, una oportunidad… Solemos valorar solo cuando nos falta. Pero, ¿y si empezamos a agradecer antes de que la vida nos lo arrebate?

Damos por hecho demasiadas cosas. Respirar sin dificultad. Caminar sin dolor. Que alguien nos pregunte cómo estamos. El abrazo de una madre, la risa de un hijo, una conversación sin prisas. La fe que nos sostiene, aunque a veces la ignoremos.

No hace falta un susto para apreciar lo que ya es un milagro. No hace falta perder a alguien para decirle lo importante que es. No hace falta tocar fondo para entender que cada día es un regalo.

Nos creemos dueños de nuestro tiempo, pero no lo somos. Nos aferramos a seguridades que no existen. Pero lo que sí podemos hacer es vivir con gratitud. Con la certeza de que todo lo que tenemos es un préstamo, un regalo inmerecido.

Agradecer es reconocer que nada nos pertenece, pero que todo puede ser aprovechado para amar más, servir mejor, vivir con propósito.

Hoy, ahora mismo, tienes algo que merece ser agradecido. No lo dejes para mañana. Que la vida no tenga que enseñarnos a la fuerza lo que hoy podemos abrazar con el alma abierta.

Suscribete a nuestro boletín

para que no te pierdas nada de untrasplantado.com

Más para ver

Experiencias

Cerro de los Ángeles. Un trasplantado.

“A veces se me olvida la suerte que tengo: sigo vivo gracias a una fe que mis padres sostuvieron cuando yo apenas podía respirar. Volver al Cerro es volver a la raíz que me levantó cuando todo parecía perdido.”

Experiencias

Abrazar la Cruz. Un trasplantado.

“Dejé de arrastrar mi cruz como un fardo impuesto y, al abrazarla, descubrí que allí me esperabas Tú: transformando mi dolor en camino, mi fragilidad en sabiduría y cada tormenta en un ‘todo era para bien’.”

Mi primer libro, “Diario de un trasplantado”.

En el cuento algunas de las cosas que a mí, como enfermo crónico y como sanitario, me ayudan a llevar mi enfermedad y sus consecuencias y a la vez intentar alcanzar la felicidad. Ya podéis comprarlo en el siguiente enlace:

Descubre más desde Un Trasplantado

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo