Buenas, equipo un trasplantado, os cuento que el destino me ha jugado una pequeña mala pasada con unas toses persistentes que me llevaron de vuelta a urgencias.
Pero que no cunda el pánico, ¡no es el fin del mundo! Aunque mi racha de evitar urgencias se rompe, aún se me sigue dando bien evitar ingresos, ¡la última vez fue en agosto!
La batalla actual: una neumonía. Pero aquí la buena noticia, me dan tres días para mejorar y evitar el ingreso hospitalario. ¡Vamos equipo, sé que podemos lograrlo! Yo con mis ganas y las medicinas y vosotros con vuestros ánimos y oraciones.
Vivir con un cuerpo enfermo tiene sus desafíos, y una de esas cosas es ser más vulnerable a los agentes externos. Pero, ¡eh!, ¡aquí seguimos en la lucha!
Por suerte, no es grave por ahora, así que estoy en casa, siguiendo las órdenes médicas y haciendo reposo. Pero, ¿saben qué? Estoy aprovechando este tiempo para reflexionar sobre el regalo de la vida y la suerte que es vivir en un sitio como Madrid.
¿Alguna vez has enfrentado una situación similar? ¡Cuéntame tu historia y consejos en los comentarios! Juntos somos más fuertes, y sé que vuestras cariñosas palabras serán mi mejor medicina.